¿Asesinatos o suicidios?

Por  Ángel Frías
Escritor

Es lo que piden los españoles.

     Atracador, es alguien que usa la violencia o engaño con propósito de robar dinero o materiales valiosos.

    Entre los atracos está el nunca nombrado como tal, pero que a la postre es uno de los más dañinos por su costo en vidas humanas; ese atraco es el ejercido por los gobiernos contra su pueblos indefensos.  Se trata de algo más que el simple robo, ejercido por los maleantes de turno.  Por esa razón, es muy habitual que este tipo de delito ni siquiera tenga pena alguna, puesto que se suele hacer desde el poder que un pueblo confundido por diversas circunstancias (amparados en el valor de unas papeletas depositadas en unas fechas que suelen pactar entre ellos), le otorgan el omnipotente poder de arrasar con el patrimonio y las vidas de esos mismos que les eligieron. 

     El motivo esencial es que si bien el atraco a mano armada es un delito que atenta muy directamente contra la vida, el desfalco contra el patrimonio -amparado en ese poder que un día el pueblo decidió otorgar- ni siquiera se menciona, aún a expensas de empezarse a conocer tras el aumento de suicidios que supone un mayor riesgo para la vida de esos bienintencionados habitantes. 

     Tomemos como ejemplo a ese gran país llamado España, donde al parecer -según noticias leídas en la prensa nacional- la crisis mata.  No todos los organismos mundiales se atreven a dar cifras, pero algunos  como la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Asociación Española de Psiquiatría Privada (ASEPP) o Servicios Europeos de Empleo (EURES) se empiezan a tomar en serio el alarmante número de suicidios en ese maravilloso país, donde el paro ronda los seis millones de habitantes.  Eso, al parecer, a los gobernantes de turno les importa un carajo y, tras detectar el aumento de estas muertes, el control de muertes que se venía haciendo en el país, en el  2007 se suprimieron los datos y solo informaron de esos óbitos basándose en el boletín de defunción judicial utilizado para las simples estadísticas sin entrar a valorar su causa.

     Según datos ofrecidos por el periodico Alerta Digital, la ASEPP ha advertido de un repunte en la tasa de suicidios que se están produciendo y que se han agravado como consecuencia de los efectos de la mal llamada crisis económica. Baste con citar algunos de los casos de suicidio provocados directamente por esos robos denunciados al principio:  el 4 de noviembre un hombre de 55 años en Rota (Cádiz) dejando mujer y tres hijos, el 27 de septiembre, un hombre de 47 se suicida en Alpedrete (Madrid); estaba en paro y deja dos niños y a su mujer; el 17 de septiembre una mujer madre de seis hijos se suicida por una deuda de 900 Euros en Madrid; el 10 de septiembre un hombre de 43 años se suicida en Leganés (Madrid) por su situación económica. Estos son algunos de los asesinados por esos atracos encubiertos y de los que jamás se conocerá a ningún imputado...